UNA HISTORIA EN LA HISTORIA (Crónica de las vicisitudes para alcanzar la autonomía indígena en Huacaya) PRIMERA PARTE Por: Elmer Peña y Lillo

Dentro del medidor de nuestros tiempos, el calendario, se ha instituido el día 22 de enero de cada año como la celebración del “Día del Estado Plurinacional de Bolivia”, para muchos un día de feriado más, para otros por la indiferencia de vernos en nuestros espejos, será mejor expresar con sorna, “¡¡¡¿Qué es eso?!!!”, en el decir de otros circulara en sus mentes mascullar, “¡¡¡qué barbaridad donde estamos!!!, a donde hemos llegado, hemos perdido la sensatez”; sin embargo, para otros muchos invisibles al cotidiano puede significar un trago amargo de imposibilidades caminadas en quince largos años, es la historia que quisiéramos hacerles “conocer” referida a las peripecias de “ser”, en el Estado Plurinacional de Bolivia, el Gobierno Autónomo Indígena Originario Campesino Guaraní Chaqueño de Huacaya.

PARA ENTRAR EN TEMA

Bueno, al menos no queda duda que los diferentes pueblos prehispánicos, vivientes en el territorio que hoy conocemos como Bolivia, con sus características y particularidades propias contaban con una demarcación territorial espacial propia donde vivían, con una organización política que gestionaba el territorio, las relaciones sociales de convivencia al interior del grupo, como también las relaciones a desarrollar con otros grupos; además con un bagaje de conocimientos que garantizaban su reproducción biológica y otros que establecían la interpretación que tenían de la naturaleza y el cosmos que garantizaba su reproducción sociocultural. El arribo de los españoles generó una conflictividad social, que connotaba la característica de ser una invasión, en el sentido de irrumpir, entrar a la fuerza, violentar, ocupar, desestructurar, a cuatro aspectos centrales: el territorio, el sistema de gobierno, el complejo cultural y la humanidad de sus habitantes.

La región sud este del país, lugar donde se encuentra el Municipio de Huacaya, al inicio del periodo colonial estaba habitada mayoritariamente por el pueblo chiriguano/guaraní, comparada con la densidad poblacional de occidente esta era relativamente baja; la Chiriguania o Avarenda como la reconocían sus habitantes  se extendía desde la parte central del actual Departamento de Santa Cruz, atravesando la parte oriental de los actuales Departamentos de Chuquisaca y Tarija, su población diseminada en una gran cantidad de comunidades ocupaban los valles de una extensa cadena de montañas paralelas que discurren de norte a sur, zona conocida fisiográficamente como el subandino.

¡¡¡HAY QUE RESISTIR AL INTRUSO, NO PASARAN!!!

Territorialmente durante el periodo colonial las autoridades españolas no pudieron ejercer un dominio estable sobre esta región, se encontraron prácticamente todo el tiempo en un estado de zozobra y angustia por los constantes ataques que sufrían por parte de los chiriguanos, resignándose a reconstruir una y otra vez los poblados establecidos que eran desbastados recurrentemente, el interés estratégico que perseguía la Corona Española era establecer una vía de comunicación estable desde el puerto del Callao hasta el puerto de Asunción; viendo que el proceso de ocupación territorial era desgastante para la institucionalidad de la Corona, optaron por que sea la iglesia a través de las Misiones quien fuera consolidando gradualmente núcleos de adoctrinamiento que “civilice” a estos irredentos, pero también cuando la Corona consideraban oportuno organiza campañas militares de escarmiento a los “malones” propiciados por los chiriguanos, aunque los sacerdotes de las misiones objetaban el asentamiento de población civil migrante, esta se dio gradualmente pues las tierras eran bastante productivas y muy aptas para la cría de ganado bovino; estos aspectos significaron un retroceso inicial en el control territorial para la nación chiriguana.

Tanto su sistema de gobernanza, como su bagaje cultural durante el periodo colonial buscaban ser erosionados por la Doctrina de la Misión y la “vocación” de los padres conversores de imponer “la civilidad”; si bien parte de la población chiriguana especialmente los niños y adolescentes se los nucleaban en la Misión como “neófitos” para educarlos, esta presencia era circunstancial, motivadas por necesidades pragmáticas y ante el desazón de los religiosos, veían como los chiriguanos volvían a lo que los sacerdotes denominaban “su gentilidad”, es interesante graficar como un mburuvicha – líder comunal –  interpelo a un cura reflexionándole diciendo: “Si tú eres feliz siendo cristiano, yo soy igual de feliz siendo chiriguano”. Sin embargo, con la acción misional y la visión que tenían las autoridades españolas de la resistencia chiriguana, se dio inicio la construcción de un imaginario colectivo en el resto de la sociedad que calificaban con todos los adjetivos necesarios que desvalorizan e inferiorizan al ser chiriguano, “el salvaje”, declarando con ello de facto su deshumanización.

QUITARNOS E IGNORARNOS

Con la instauración de la Republica, las nuevas elites dominantes se proponen tener una posesión efectiva de todas las tierras productivas y por ello encamina toda una serie de medidas jurídicas y militares que les permitan desestructurar definitivamente, en todo el territorio boliviano, las formas de gestión comunal de tierras que mantenían en posesión efectiva los diferentes pueblos prehispánicos; en el caso de la Avarenda este proceso fue particularmente sangriento y transcurrió en tres fases, al inicio del periodo republicano se fue incrementado la ocupación de tierras chiriguanas por parte de “criollos” ganaderos, invasión que era repelida por las comunidades de forma violenta pero el avance de los ganaderos se fue consolidando con el apoyo de incursiones de fuerzas militares propiciadas por el naciente Estado Boliviano, las comunidades chiriguanas fueron gradualmente acorraladas y replegadas por una parte a zonas de marginalidad productiva y por otra a las Misiones, pese a que la resistencia fue larga y encarnizada, al fin por la superioridad bélica y de recursos la resistencia fue quebrada, las misiones secularizadas, las comunidades chiriguanas sojuzgadas y sometidas a un régimen de semiesclavitud, despojadas de su territorio; siendo un Estado “moderno”, este se preguntaba ¿cómo puedo legitimar el despojo de una tierra cuyo aprovechamiento  es sostenido en un régimen arcaico como es la esclavitud?,  paradójicamente la Ley de Reforma Agraria de 1953 consolido legalmente la posesión de las tierras que arrebataron los ganaderos reconocidos en ella como campesinos, mientras que a los legítimos propietarios, el pueblo chiriguano/guaraní, apenas si les alcanzo ser reconocidos como “trabajadores rurales” de estas haciendas.

Ninguna resistencia puede ser sostenida sin un conglomerado conceptual de sentidos de vida que los cohesione y en formas organizativas que concretiza la ejecución de sus mandatos; dos figuras conceptuales son significativamente cohesionadoras para la resistencia del pueblo chiriguano, el Ñande Reko – Nuestra Forma de Ser – que expresa su identidad en todos los aspectos de la vida frente a “otros” y el Iyambae – Sin Dueño – que invoca a su ser en libertad, en autonomía de sus decisiones, mientras que en el plano orgánico institucional se asentaba en un mando altamente descentralizado pero de dinámica articulación en momentos clave, partía de una representación de grupo de familias, encarnada por el tubicha, una representación de zona, el mbruvicha, y una representación de región el mbruvicha guasu, pero todas las definiciones y decisiones  en sus diferentes niveles partían del ente deliberativo central la Asamblea, a estos se sumaban los ipajes – hechiceros –  y los arakua Iya – conocedores –. El vigor de esta organización no logro ser debilitada profundamente por la colonia en más de trecientos años, pero con el advenimiento de la Republica el empuje y la persistencia de los karai, – criollos/blancos –, por arrebatar las tierras al pueblo chiriguano/guaraní fue minando aceleradamente la capacidad de resistencia hasta que finalmente fue derrotado a finales del siglo XIX, el grado de agresividad y saña fue tanta que los sumió en una profunda depresión, pues ya no podían asumirse Iyambae, habían perdido sus tierras y se veían peones sujetos al patrón que los había despojado, como podían sentir orgullo de su Ñande Reko si les restregaban a cada instante que eran lo peor, que sus costumbres son de salvajes, que esto, que aquello, el fin era desvalorizarlos, se había impuesto el discurso del dominador.

DEBAJO DE LAS CENIZAS ESTA LA BRASA

Pasaron cerca de ochenta años y gradualmente la gente empezó a reorganizarse poco a poco por distintas partes de la Avarenda y hacia 1987 recobran y reconstruyen la organización a nivel comunal, zonal y departamental en la conocida hoy como Asamblea del Pueblo Guaraní – APG, su presencia  y actuación efectiva como organización durante la convulsa década de 1990 -2000, los aproxima a los otros pueblos de las denominadas “ tierras bajas”, “ tierras altas”, “las naciones originarias”, juntos y revueltos van cocinando a fuego lento un marco de propuestas que permitan recobrar la autogestión territorial, un sistema político basado en la democracia comunitaria, un régimen social que retome las practicas comunitarias de convivencia y justicia social que han ejercido ancestralmente; pero implementar estas propuestas significaban una transformación profunda del Estado y para ello con una participación activa de la APG junto a otras organizaciones, con distintas movilizaciones se presionó para que se convoque una Asamblea Constituyente y entre el 2003 al 2006 las organizaciones debatieron y empezaron a construir las propuestas para la Constituyente, finalmente aglutinadas todas las organizaciones de campesinos y naciones originarias  en el Pacto de Unidad consensuaron  una propuesta que fue el mandato para los delegados a la Asamblea Constituyente quienes lucharon porque sean incluidos en la Constitución sus planteamientos, finalmente la Nueva Constitución Política del Estado establece:

Artículo N° 2. Dada la existencia precolonial de las naciones y pueblos indígena originario campesinos y su dominio ancestral sobre sus territorios, SE GARANTIZA su libre determinación en el marco de la unidad del Estado, que consiste en SU DERECHO A LA AUTONOMÍA, AL AUTOGOBIERNO, A SU CULTURA, AL RECONOCIMIENTO DE SUS INSTITUCIONES Y A LA CONSOLIDACIÓN DE SUS ENTIDADES TERRITORIALES, conforme a esta Constitución y la ley.

Artículo N° 289. La autonomía indígena originaria campesina consiste en el autogobierno como ejercicio de la libre determinación de las naciones y los pueblos indígena originario campesinos, cuya población comparte territorio, cultura, historia, lenguas, y organización o instituciones jurídicas, políticas, sociales y económicas propias.

Artículo 290-I. La conformación de la autonomía indígena originaria campesina se basa en los territorios ancestrales, actualmente habitados por esos pueblos y naciones, y en la voluntad de su población, expresada en consulta, de acuerdo a la Constitución y la ley.
II. El autogobierno de las autonomías indígenas originario campesinas se ejercerá de acuerdo a sus normas, instituciones, autoridades y procedimientos, conforme a sus atribuciones y competencias, en armonía con la Constitución y la ley.      

Para la APG esta nueva normativa se constituye en una oportunidad para recuperar la gobernabilidad sobre su perdido territorio, por ello resuelve encarar la conversión de los entonces vigentes Gobiernos Municipales que se extendían por el territorio guaraní en Gobiernos Autónomos Indígenas Originarios Campesinos.

DEL DICHO AL HECHO, HAY MUCHO TRECHO 

Concretizar la conformación de ese autogobierno indígena tal como lo dibujaba la Nueva Constitución, en la práctica mostro que significa luchar con una percepción arraigadísima, internalizada hasta la medula de nuestro ser social “boliviano” con respecto a los pueblos originarios que declara la noción de “su inferioridad frente a”, que plantea “su imposibilidad para”,  que en última instancia pretende negar su existencia, su pervivencia; manifestación social que la conocemos como “colonialidad”. Sin embargo, esta construcción de las elites dominantes está motivada por garantizar sus prerrogativas de control sobre los recursos materiales productivos existentes en el territorio y la fuerza de trabajo que la habita, la misma que es sostenida por un ordenamiento institucional impuesto en el cual puedan mantener situaciones de privilegio, construyendo y reconstruyendo un protocolo que lo protege y pretende garantizar su legalidad y legitimidad, esa nebulosa que la conocemos como burocracia, la cual entre idas y venidas interminables, mide y regula nuestras posibilidades o imposibilidades de ejercer nuestros derechos a “ser”, es la manifestación de lo que se conoce como la “colonialidad del poder”. Es esta la trama por el que atravesaron las comunidades guaranís de las Capitanías de Santa Rosa y Huacaya y que daremos a conocer a continuación.

En agosto del 2009 la normativa legal establece que los municipios que quieran optar a convertirse en Autonomía Indígena Originaria Campesina – (AIOC) – deberán efectuar un referéndum de consulta a la población de su jurisdicción el 6 de diciembre del 2009; las Capitanías Zonales Guaranís del Municipio de Huacaya conociendo que cumplen los requisitos solicitan e impulsan que se realice este referéndum en el  Municipio Villa de Huacaya; realizado el mismo los resultados alcanzados fueron los siguientes: de un total de 628 votos válidos, 291 – el 46,34% – no estaban de acuerdo con la conversión, mientras 337 – el 53,66 % – si estaban de acuerdo con la conversión. Estos resultados nos mostraban ya que un significativo porcentaje de los participantes en el referéndum no se identificaban con la posibilidad de formar un gobierno de carácter indígena guaraní, si comparamos por ejemplo con el referéndum realizado en el Municipio de Tarabuco, donde la nación Yampara que impulsaba la conversión en AIOC, en el referéndum de consulta a la población de 7.057 votos válidos, 6.408 – que representaban el 90,8 % – estaban de acuerdo en la conversión, mostrando una voluntad aplastante de formar un gobierno local como nación Yampara.

Pese al estrecho margen que aprobaba la conversión del Municipio Villa de Huacaya en AIOC, los resultados de la consulta habilitaba a iniciar el proceso de transición de acuerdo a la norma establecida por el Gobierno Nacional el 24 de mayo del 2010; las Capitanías Zonales Guaranís cumpliendo estos lineamientos, inicialmente promovieron la conformación de la Asamblea Constitutiva, órgano deliberativo conformado por delegados de las comunidades guaranís, delegados de las comunidades campesinas y de la población que no se asumía ni guaraní ni campesina, quien estaría encargada de elaborar el Proyecto de Estatuto Autonómico que regiría el funcionamiento de la AIOC, de acuerdo a norma este proyecto fue aprobado por dos tercios de sus componentes y luego fue derivado al Tribunal Constitucional Plurinacional quien dio su visto bueno en su declaración de constitucionalidad el 19 de diciembre de 2014, finalmente se convocó al referéndum de aprobación que se realizó el 9 de julio de 2017. Llegar a este punto significó para la organización guaraní un proceso continuo de SIETE AÑOS de gestión y negociación con los actores locales que se oponían a la conversión a constituir un gobierno autónomo local de carácter originario campesino y por otra parte con los pesados y engorrosos procedimientos del aparto institucional jurídico establecido.

En el referéndum de consulta de aprobación sobre el nominado Estatuto de la Autonomía del Territorio Indígena Guaraní Chaqueño de Huacaya – IVI YEYORA TËTA GUASU HUACAYAPEGUA –  se obtuvieron los siguientes resultados; de acuerdo al padrón electoral emitido por el Órgano Electoral Plurinacional, (OEP), estaban habilitadas para participar 1.471 personas, el total de votos emitidos fueron 1.143 representando un 77,7% de participación, 462 votos – 41.,4% – optaron por aprobar el Estatuto, 654 votos – 58,6% – rechazaron el Estatuto, 27 votos fueron blancos o nulos por tanto no válidos.

 

 


FUENTES

Historia de un Pueblo – Los Guaraní Chiriguano – Francisco Pifarre

https://biblioteca.cipca.org.bo/cuadernos-de-investigacion/historia-de-un-pueblo-los-guarani-chiriguano-nueva-edicion-ampliada

Historia del Pueblo Chiriguano – Thierry Saignes

https://www.academia.edu/12799702/Thierry_Saignes_Historia_del_pueblo_chiriguano_2007_Compilaci%C3%B3n_introducci%C3%B3n_y_notas_Isabelle_Comb%C3%A8s

Autonomía Indígena Originaria Campesina – Wikipedia

https://es.wikipedia.org/wiki/Autonom%C3%ADa_ind%C3%ADgena_originario_campesina

Referendo Autonómico 2017 – Órgano Electoral Plurinacional

https://www.oep.org.bo/procesos-electorales-y-consultas/referendos/referendo-de-estatutos-autonomicos-y-cartas-organicas-2017/