Estamos con Winsor Torrico para entrar al tema respecto a la salud integral, más allá de lo que entendemos como salud desde la medicina occidental, sino una salud más holística y cómo entendemos estos acompañamientos que nos curan, nos sanan, cómo entendemos esta otra forma de salud, esta otra forma también de entender las enfermedades que nos aquejan.
Windsor nos dice: Soy educador popular, una persona dedicada al campo de la educación hace mucho tiempo, parte en este momento del Espacio de Crianza Qantatayita junto a mi compañera, y venimos haciendo ya un trabajo de estos últimos cuatro años, entre estos temas está el tema de repensarnos siempre desde esta práctica que hacemos, es el arte, la cerámica, los telares, la música, talleres de cosmovisión, talleres sobre mitos, siempre preguntarnos sobre la concepción sobre la cual está construida la educación, y por tanto también la concepción sobre la cual está construida el tema de la salud.
Cómo entender al ser humano desde una visión distinta, es un desafío enorme, porque lastimosamente hay una hegemonía, una narrativa hegemónica que nos impulsa, nos muestra que hay una sola manera de entender la vida y al ser humano, y esa es esta sociedad moderna, profundamente extractivista que también extrae la sustancialidad del ser humano, le hace mirar solamente como un individuo desconectado de muchas cosas. Es un elemento muy presente en esta sociedad, sobre todo que la estamos viviendo y también la estamos sufriendo, también, por supuesto, se generan resistencias y emergencias de nuevas propuestas.
Nos han metido la idea de que el ser humano es un individuo desconectado de todo, de la naturaleza, desconectado del cosmos, es un individuo autónomo que vela por su propia existencia, por así decirlo, olvidando de que el ser humano es un ser interdependiente.
La vida es posible porque hay una cooperación, un Ayni entre muchos factores, muchos elementos presentes, el ser humano se beneficia, como todos los seres vivos, de esa interdependencia, por lo tanto es un ser profundamente conectado, bajo este concepto, que se trabaja desde la escuela, que se trabaja desde la academia misma, si uno va a las universidades o a la misma escuela, nos enseñan a entender la vida de manera fragmentada, al mismo tiempo también nos enseñan a mirar al ser humano como un sujeto aislado de todo, la naturaleza es tu enemiga, tienes que dominarla, eres un ser ajeno al cosmos, hay que conquistar el cosmos, el universo, ese es un poco el concepto, y la gente queda así, aislada, reducida, por tanto, ese mismo concepto está bien extrapolado también, bien profundizado y curtido en la academia también. No te permiten, en el mismo campo médico, los doctores, los médicos futuros, salen formateados bajo ese concepto, no permiten que entren otras visiones.
Ahí entra la visión nuestra, la visión de nuestro pueblo, la visión del pueblo Aymara y también del pueblo andino, en este caso, seguramente, aclararemos desde la visión de nuestro pueblo Aymara, del cual somos parte, como también el pueblo quechua, el pueblo denominado a sí mismo, así denominado por los antropólogos como indígena.
Pueblo Yuracaré, Tacana, Wehenayek, hay una concepción distinta sobre la salud, sobre el ser humano. Primeramente, el ser humano es un ser interdependiente, conectado con lo cósmico, conectado con la naturaleza, su existencia depende de eso, por tanto, su salud también depende de esa relación con el todo, es decir, la salud hoy por hoy se conceptúa como algo estrictamente sintomático, se atacan los síntomas, se atacan los efectos que uno observa, para eso hay toda una industria médica. Entonces, tienes gente que puede tener cáncer, tiene hepatitis,etc, lo único que hace la gente es inyectarle un conjunto de medicamentos profundamente, esos fármacos evidentemente terminan dañando a la persona, pero no se ponen a analizar que la persona, al ser una visión integral, desconocen los otros factores que entran en juego…..ponemos aquí la entrevista completa junto a Windsor para que sigas escuchando su intervención….