Como nos lo contó Luis “Cosita” Romero, ante estas resistencias, la provincia de Entre Ríos se declaró libre de nuevas represas sobre los ríos Paraná y Uruguay gracias a la sanción de la ley 9092 del 25 de septiembre de 1997, extendida en 2002 también al río Gualeguay. La norma fue llevada al artículo 85 de la constitución provincial, al ser esta reformada en 2008.
Pero la amenaza para el río Paraná y la vida en esta región no son sólo los megaproyectos hidroeléctricos, sino también la basura que produce la ciudad. El botadero municipal que tiene más de 100 años de antigüedad está justo en la ribera del río. De ese botadero dependen cientos de personas que escarbando entre sus restos consiguen recursos para la subsistencia familiar. Pero ante ese panorama complejo y contradictorio, en el entorno de la zona existen maravillosos procesos de Cultura Viva Comunitaria que retejen la historia y crían otros modos de vida más respetuosos de la convivencia equilibrada con la naturaleza y entre seres humanos. Sin duda, ejemplos dignos a seguir.