DESALOJO DE LAVANDERAS EN CALA CALA, UN INTENTO DE LIMPIEZA SOCIAL Conversamos con Jancarla y Alejandra

En el departamento de Cochabamba, se viene dando un hecho por demás preocupante, que nos llama a la reflexión y acciones de apoyo a las compañeras/hermanas Lavanderas de Cala Cala, quienes vienen sosteniendo una lucha en defensa de sus fuentes laborales, pero también que nos tratan de hacer dar cuenta a través de su acción la importancia que tiene para nuestro territorio la labor que realizan, pero también el conservar nuestra historia en nuestras memorias presentes, el lavado a mano que aún persiste, como ese trabajo y comunidad se compone en sus mayor parte por mujeres y sus wawas, ocupando el espacio público desde su trabajo, con la crianza colectiva de las wawas y cuidado del entorno ya que es el mismo que hace posible el desarrollo de sus actividades con las cuales sostienen económicamente a sus familias. Para conversar al respecto de lo que viene aconteciendo, de este desalojo de las lavanderas de la zona de Cala Cala, nos encontramos con las compañeras Jancarla y Alejandra, quienes nos van a poner en contexto respecto a lo que sucede.

Jancarla nos comparte: Lo que pasa es que aquí en la lavandería nos quieren quitar el predio que ocupamos, que corresponde a el lavado y el predio de lo que es el secado, nos quieren desalojar los de la casa comunal Tunari, aquí en la Merchor  y en las Circunvalaciones.

El día martes 25 de febrero han venido los funcionarios de la casa comunal y nos han quitado lo que es los predios donde están los palos que sostienen los alambres donde secamos la ropa, los alambres nos han cortado, hemos sido agredidas verbalmente y doña Antonia, que es otra lavandera, ha sido igual arrastrada por querer evitar que corten los alambres y saquen los postes, ellos no han tenido compasión, igual la han arrastrado a la señora.

No nos entienden, les hablamos, hemos ido a hablar igual a la casa comunal, pero ellos cada vez cambian de sub-alcalde. Entonces ahora dice que es otra sub-alcaldesa y ahora esa sub-alcaldesa es la que ha venido, la que nos ha propuesto, directo venir y sacárselo los palos, eso es lo que pasa aquí.

Nosotras somos, en realidad como unas siete lavanderas aquí. Éramos quince lavanderas, anteriormente, nosotras hacemos el lavado, que es a mano.

Lavamos a mano, secamos, no usamos máquinas, nada. Entonces, en ese predio que ocupamos es que realizamos nuestro trabajo, y la alcaldía no quiere, que ya sequemos las ropas al sol en los tendederos de alambres y postes, la gente nos traen a hacer lavar sus ropas quiere llevarse esas ropas secas, no quieren mojado, si nos quitan ese predio con eso nos estarían quitando nuestra fuente de trabajo.

Nosotras trabajamos aquí desde hace unos 25 a 28 años que nosotros aquí trabajamos. Mi mamá es antigua, después la otra lavandera también, que es doña Mayra, es antigua, ellas son las más antiguas.

Para sacarnos de aquí no nos han dado ninguna alternativa, las razones que nos dan para sacarnos de aquí es que dicen que es área verde, según ellos, dice que contaminamos el medioambiente, aquí no contaminamos el medioambiente porque no quemamos ropa nosotros, solamente lavamos…..

Alejandra nos dice: La verdad es que son muchos años que yo ya vengo acompañando a las señoras lavanderas. Yo soy su vecina, también soy su cliente, por generaciones, desde mi abuela, porque en realidad es una tradición el lavado a mano en las lavanderías de Cala Cala. He realizado una tesis sobre los matriarcados y siempre que pasaba por ahí decía, esto es un matriarcado. Mujeres trabajando empoderadas, con un trabajo digno, trabajando junto a sus hijos, generaciones trabajando, porque Doña Adela, por ejemplo, es la amiga de mi abuela, ella es la mamá de Giancarla, somos de la misma generación, tenemos nuestros hijos que se conocen. A mí me interesaba siempre lo que ellas hacían, no solamente era su cliente, sino además su amiga. Con el tema del matriarcado yo me acerqué a ellas también para pedirles hacer un documental, porque veía que siempre tenían estos problemas con la comuna.

Claramente, hay que decirlo con todas las palabras que a esto corresponde, este es UN INTENTO DE LIMPIEZA SOCIAL, ¿Eso qué quiere decir? La zona es residencial, acaban de construir unos condominios por ahí cerca y a esta gente de altos ingresos no les gusta que la ropa esté tendida, que la ropa esté expuesta, porque según ellos es antiestético. Años atrás, yo ya hice el documental, pero por falta de financiamiento, en realidad fue una cuestión independiente de voluntariado que hicimos con varias personas. No hemos podido difundir, pero ahora vamos a difundir, porque tenemos una finalidad.

Nosotras queremos que se denomine PATRIMONIO INMATERIAL AL LAVADO DE ROPA A MANO, para que estas señoras dejen de ser hostigadas, porque hay un hostigamiento, además, los de la comuna han tenido muchos actos corruptos, como ir a cobrar dinero para que ellas no sean molestadas, abusos, hostigamiento, acoso, incluso acoso sexual por parte de los varones, porque la mayoría son mujeres las que lavan ahí, yo tengo todos esos testimonios.

Hace un año y medio, después de todos estos años, son como cinco o seis años que estamos desde haber filmado para el documental, yo voy acompañándolas, y año tras año había citaciones en la comuna. Entonces, en una de esas citaciones, yo les dije a las compañeras, como yo soy periodista, les dije, voy a pasar por una de ustedes, vamos a hacer esto, me voy a camuflar, vamos a ver qué es lo que dicen cuando no hay medios de comunicación, entonces yo he pasado por la hija de doña Antonia, doña Antonia me ha dicho, vas a pasar como si fueras mi hija. He escuchado todas las atrocidades que han dicho estos abusivos de la comuna, porque realmente eso es lo que son, son unos abusivos, maltratadores, las tratan como la peor basura, cuando son gente digna, digna de respeto, ellos deberían tener vergüenza de tratarles así, después de escuchar todas las sandeces que les han dicho a las señoras, he sacado mi credencial de periodista y me he acercado a la mesa, y se han puesto a temblar, porque son unos cobardes, son unos cobardes. Todos estos hombres, porque la mayoría son hombres, que actúan en contra de estas señoras.

Cuando yo he sacado mi carnet de periodista y les he increpado, les he dicho que ellos deberían tener vergüenza de molestar a estas mujeres que trabajan dignamente y con el esfuerzo de su espalda, de sus manos, de generaciones, están lavando nuestra ropa. Es un trabajo loable, digno, que merece respeto. Deberían tener vergüenza….ponemos aquí la entrevista completa junto a Jancarla y Alejandra para que sigas de escuchando su intervención……

 

VideoArte que narra la historia y dinámicas que se desarrollan en el sector:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente original de la imagen de portada: https://www.lostiempos.com/actualidad/local/20150124/lavado-sitios-publicos-compite-industrial