EL HUECO EN EL MURO: LA NECESIDAD DE VIVIENDA EN BOLIVIA Entrevista con Aniceto Hinojosa – OINCO

En Bolivia  para la Constitución Política del Estado, es derecho fundamental un hábitat y vivienda adecuada, que dignifiquen la vida familiar y comunitaria, asignando y asumiendo el Estado esta responsabilidad. Por estas razones se crea la Agencia Estatal de Vivienda AEVIVIENDA, que entre el periodo 2013 – 2019 construyó 117.032 soluciones habitacionales.

En nuestro país se reporta un alto índice de déficit habitacional cuantitativo y cualitativo. El 67,5 % de la población vive en áreas urbanas, concentradas principalmente en el eje metropolitano del país. Se estima que para el 2030, el 80 % de la población será urbana.

En Bolivia, el déficit cualitativo se caracteriza por un alto grado de hacinamiento, aproximadamente el 30 %. Por otro lado, el 24 % de la población refleja que tres o más personas duermen en una sola habitación y se estima que el 31 % de la población vive en condiciones inadecuadas. Finalmente, el 64,8 % no cuentan con espacio suficiente en su vivienda (INE 2018).

La estimación de número de viviendas para áreas rurales y urbanas se da por aspectos de priorización de niveles de pobreza, calculado en base a un índice de necesidades básicas insatisfechas, proyectadas por el INE, que indica que en Bolivia un 35.3 % vive en situación de pobreza moderada. En este sentido, para la atención del déficit cuantitativo se definió el 10% y para el cualitativo el 90%; en base a estos parámetros, se establece una meta de 76.535 viviendas en 5 años con la construcción de 15.307 unidades por año y si se incrementara el ingreso por otros recursos, la asignación  ascendería  a 104.705 con 20.941 unidades por año*.

Bajo estos datos que nos arrojan los números, la situación habitacional en Bolivia merece una especial atención por ser una de las necesidades más urgentes para el ser humano.

En este espacio del Hueco en El muro, planteamos varios elementos que nos permitan analizar esta temática desde los aportes que nos brindan los datos del INE, así como la experiencia de trabajo de la Organización de  Inquilinos de Cochabamba, para lo cual contamos con la presencia de Aniceto Hinojosa representante de esta instancia.

Elementos como:

  • Accesibilidad al momento de acceder a un plan de vivienda digna, planes de pago, interese, tratamiento de estos créditos de parte de las instancias bancarias, que nos conducen a la siguiente cuestionante: Los requisitos son alcanzables para todxs, especialmente en los sectores que viven de la economía informal y donde la mayoría es integrada por mujeres jefas de hogar?
  • Las formas de construcción de estas viviendas, especialmente en el área rural. ¿Se están respetando las dimensiones necesarias para las personas que habitaran esas viviendas? ¿Se hace uso y se respeta el conocimiento ancestral de la manera de construir nuestras casa (el uso de adobes, caña hueca, importancia en la distribución de espacios) que responda a las necesidades y formas de vida de esos territorios?
  • En cuanto a la regularización de papeles de propiedad, como se hace accesible este tipo de trámites que nos permitan asegurar la propiedad de ese espacio de parte de los sectores más desfavorecidos, ante la tardanza de dicho trámite así como los elevados costos en los mismos, que mecanismos de parte del estado garantizan a la vez la propiedad colectiva?.

Don Aniceto Hinojosa, desde la realidad que se vive como personas en situación de inquilinato nos comparte lo siguiente:

Para nosotros, como personas que vivimos en situación de inquilinato, es muy importante todo lo que ha venido ocurriendo especialmente desde la crisis política que atravesamos el 2019 que se manifestó con paros, bloqueos que iniciaron nuestro calvario por la imposibilidad de ejercer nuestro derecho al trabajo, esto se vio agravado el 2020 por la crisis sanitaria mundial, donde debido a la declaratoria de emergencia sanitaria y la instalación de  una cuarentena rígida este derecho se vio aún más vulnerado, dando a relucir las grandes diferencias entre sectores privilegiados y sectores con mayor desventaja.

Esto se ha manifestado en la relación existente entre el inquilino, que se vio afectado en su posibilidad de generar recursos económicos que le permitiesen cumplir con sus responsabilidades en cuanto a la alimentación y acceso a la vivienda  y  el propietario, que no ha logrado comprender que las necesidades y urgencias no nos afectan de la misma manera, dejando de lado la empatía y desalojando a los inquilinos dejándoles prácticamente en la calle y en algunos casos arrebatando sus pocas pertenencias para cumplir con los pagos de alquiler adeudados, haciendo caso omiso, incluso, de la ley de emergencia sanitaria que nos protege a los inquilinos de alguna manera…..para seguir escuchando la intervención de Aniceto Hinojosa te dejamos la entrevista aquí…

 

 


*https://www.opinion.com.bo/opinion/jaime-alzerreca-perez/estado-situacional-vivienda/20210508203520818881.html