TECNOLOGÍAS APROPIABLES: SOFTWARE LIBRE Y HARDWARE LIBRE EN LAS RADIOS COMUNITARIAS

Las herramientas del amo no desmantelarán nunca la casa del amo. Nos permitirán ganarle provisionalmente a su propio juego, pero jamás nos

permitirán  provocar  auténtico cambio.

Audre Lorde 197

Las discusiones sobre qué tecnologías se usarán en las emisoras comunitarias u organizaciones sociales se escapan, en la mayoría de casos, del ámbito de crítica y acción política. Son debates que parecen lejanos y, a veces, hasta innecesarios. Pero estas no deberían ser decisiones que tomd exclusivamente el equipo técnico de la emisora, sino la radio al completo.

Las radios comunitarias tienen un amplio margen de acción en este sentido aunque, es cierto, la transición hacia tecnologías libres puede llegar a ser compleja en algunos ámbitos. Como explica Javier Obregón, desarrollador argentino del sistema operativo  libre  para  radios  comunitarias  EterTICs  GNU/Linux (GET), “se trata de migrar cabezas, no computadoras”. Es decir, sólo se logra una transición efectiva hacia las tecnologías libres si se sostiene sobre una profunda convicción política. Obviar este principio provocó el fracaso de muchos procesos de migración de radios comunitarias latinoamericanas. Si estas transiciones tecnológicas se enfocan únicamente desde la funcionalidad de las herramientas, los costes o la comodidad de uso, posiblemente las personas que forman parte de la radio se nieguen a utilizar cualquier otra tecnología que no sea la que han manejado toda su vida.


197      Palabras de la escritora afroamericana Audre Lorde (La hermana, la extranjera;

1994), en su crítica al dominio del hombre.


Por lo general, tendemos a la comodidad, a las rutinas, a repetir mecánicamente aquello que ya conocemos. Si a esa condición  se añade el temor frente a lo desconocido y la reproducción de ciertos mitos, ampliamente difundidos en torno a las tecnologías libres, es fácil entender por qué muchas radios se resisten a dar el salto hacia la liberación tecnológica. En cambio, si se asume la adopción de tecnologías libres como una apuesta política, como un principio que rija el funcionamiento de la emisora, la cosa será diferente. De hecho, será más sencillo vencer las resistencias porque existirán motivos éticos superiores en sintonía con los principios y objetivos de la radio comunitaria.

Radio Huayacocotla – La voz campesina, una de las primeras radios comunitarias en América Latina, también fue una de las pioneras en el uso de software libre. Desde principios de la década de los 90 cuenta con un sistema propio de automatización desarrollado sobre GNU/Linux. En la emisora tenían muy claro que la elección del software atravesaba todas las actividades de la radio: “si podemos compartir el maíz y nuestras semillas para sembrar el campo, ¿por qué no trabajar también con herramientas que nos permitan compartir?”, se preguntaban Inoscencio Flores y Alfredo Cepeda, integrantes de la emisora mexicana.198

Las radios comunitarias latinoamericanas y caribeñas han apoyado y defendido la lucha por la justicia social: los derechos laborales de los mineros bolivianos; el acceso a la educación de las y los campesinos colombianos; en México, el legítimo reclamo de poseer las tierras que se trabajan; la defensa de las semillas originarias frente a los transgénicos, en Argentina; se opusieron a los monocultivos de palma en Guatemala y a los golpes  de Estado en Honduras; o denunciaron al aire a los maridos violentos en Nicaragua. Las radios comunitarias abrazaron, y abrazan, estas causas por coherencia con sus principios. Son medios que surgieron para transformar la sociedad, para defender y ampliar los derechos de sus comunidades desde la comunicación.


198 García Gago, S. (2017). Op. Cit., p. 73.


Este periodismo de intermediación, o mediactivismo como también se lo llama, va mucho más allá de hablar por la radio.199 Las organizaciones sociales, y también las radios, hacen esfuerzos porque sus prácticas cotidianas estén en sintonía con los principios que defienden. Es decir, si promueven la horizontalidad y la participación, la radio se organizará a través de asambleas. Si se cree en el feminismo, la radio no discriminará por género y se asumirán de manera colectiva las tareas de cuidado. Entonces,

¿por qué estos principios parecen diluirse a la hora de decidir qué tecnologías utilizar? ¿Son acaso participativas, solidarias    y comunitarias las tecnologías que se eligen para hacer radio?

¿Respetan al medioambiente? ¿Promueven el capitalismo y la economía de mercado o fomentan otras formas de vida más cooperativas, horizontales, comunitarias o libres como las minkas/ mingas en el mundo andino o los tequios en México? No parecería muy coherente luchar contra el monopolio de Monsanto ayudados por otros actores dominantes como Microsoft o Apple.

Asumir el compromiso con la tecnología libre conlleva ciertos esfuerzos y sacrificios, como cualquier otra causa. Apostar por los procesos participativos puede ser extremadamente agotador pero se impulsan porque existe la convicción de que la voz de todas las personas tiene que ser escuchada. También puede serlo promover el uso de semillas tradicionales para mantener la soberanía alimentaria. O la decisión de separar los residuos y reciclar para cuidar el medio ambiente cuando sería más cómodo tirar todo junto al mismo tacho de basura. O esforzarse por incorporar el lenguaje no sexista en las producciones y planificar una agenda de entrevistas diversa y equilibrada, con economistas mujeres y amos de casa.200


199    López Vigil, J.I. (2004). Ciudadana radio. El poder del periodismo de intermediación.

Radialistas.


Si estos procesos se enfrentan con convicción luego se sobrellevan colectivamente y con alegría. Pero si se imponen sin diálogo, sin explicar su trascendencia política, tienden a fracasar. También migrar una radio comunitaria a software libre, debe  ser discutido, meditado y consensuado por el equipo. Y como  ya vimos, hay argumentos que indican que es un proceso tan urgente como necesario.

En el siglo XXI la comunicación está mediada por las tecnologías digitales y, por lo tanto, la defensa del derecho a la comunicación se traslada necesariamente a este ámbito. Al no utilizar tecnologías libres que puedan ser auditadas, modificadas y compartidas, se entrega el futuro de la comunicación a un puñado de empresas privadas:

En una sociedad moderna, quien controla el software controla la comunicación social. Controla quién puede comunicarse con quién, cuándo y para decir qué. (…) El propósito de retirar la programación de la esfera corporativa y volver a ponerla en el ámbito social, es algo indispensable para evitar que la promesa de la «era digital» se convierta en una pesadilla social.201

Defender en este siglo el derecho a la comunicación trasciende la defensa del espectro radioeléctrico. No hay que abandonar los reclamos tradicionales por acceder a las frecuencias de radio y televisión, pero se hace necesario incorporar nuevas demandas, nuevos esfuerzos y nuevos ámbitos de disputa de poder. Entre ellos, el de las tecnologías libres, tanto software como hardware.


200 Es interesante la mirada sobre este tema de la radio brasileña Amnésia. Para ellas todo, inclusive la tecnología, se agrupa alrededor de la matriz africana, su propia raíz. “Los actores y actoras se complementan dentro de un concepto de ancestralidad que moviliza una configuración de tecnología que libera este concepto de su connotación moderna y, al mismo tiempo, lo proyecta retrospectivamente. El sonido de los tambores, por ejemplo, es considerado «un software libre ancestral»”. Brock, N. (2018) A reforma agrária no ar que nunca foi. En Reinvenções do rádio: tecnologia, educação e participação. p. 233.

201 Heinz, F. (2008). Código software: de la torre marfil a la mesa ciudadana. En Genes, bytes y emisiones: Bienes comunes y ciudadanía. Ediciones Böll, p. 94.


Sobre el software libre

El software es la “parte blanda o lógica” de la informática. Es decir, los códigos, los programas informáticos escritos en lenguajes que entienden las computadoras. El software no es sólo la parte gráfica que se muestra al abrir un programa, lo que se denomina interfaz. Detrás de ella hay miles y miles de líneas de código que son las que permiten que la computadora haga lo que le pedimos.

A nivel usuarias y usuarios el software se clasifica en dos tipos. Por un lado, el software de sistema en el que se encuentran los sistemas operativos. Se trata del programa base que se comunica con el hardware y que permite usar las funcionalidades básicas de las computadoras. Dentro de este primer grupo también están los controladores o drivers, por su nombre en inglés. Son pequeños programas que hacen posible que una determinada tarjeta de audio o impresora se entienda correctamente con el sistema operativo. Por el otro, está el software de aplicaciones, o programas, que realizan tareas específicas como editar audios o fotografías, escribir textos o navegar por Internet.

Hay muchísimos sistemas operativos, más de los que imaginamos.202 En lo que a computadoras personales se refiere existen tres familias principales. Microsoft (Windows) y Mac OS (Apple), que son privativos, y GNU/Linux, que es libre.203  Dentro de la familia  GNU/Linux  hay  muchas  distribuciones  o  subfamilias, por ejemplo: Debian, Fedora, CentOS, ArchLinux, etc. Cada una de estas distribuciones son compilaciones de acuerdo a necesidades específicas, pero todas comparten la misma base que es el tándem libre GNU/Linux.204


202      Puedes            ver            algunos            en:            https://es.wikipedia.org/wiki/ Historia_de_los_sistemas_operativos

203 Libre no significa que sea gratuito. Es posible que la confusión se deba a que en inglés free significa libre y gratis a la vez. Desde hace algún tiempo para referirse al software gratis se habla de freeware y para referirse al software libre se habla de free/ libre software.


Existe la idea generalizada de que la característica fundamental del software libre es su gratuidad. En realidad, su libertad tiene que ver, entre otras cosas, con la posibilidad de ver cómo está hecho el programa y tener la autorización para modificarlo. Un ejemplo para explicar estas diferencias sustanciales entre lo libre y lo gratuito es el automatizador Zara Radio, que  la mayoría   de radios comunitarias han utilizado alguna vez. Este programa fue diseñado por una compañía que nunca cobró por usarlo, era gratis. Las emisoras lo adoptaron rápidamente, era un automatizador sencillo y no costaba nada. Así se masificó su uso por toda la región. Sin embargo, el código fuente del Zara Radio –ese código que hace funcionar el programa– era privativo, no se podía acceder a él. Cuando el programa fue lo suficientemente famoso, la compañía decidió lanzar Zara Studio, una versión mejorada pero de pago, y abandonaron el desarrollo de la versión gratuita. Como el código fuente de Zara Radio no era libre, nadie más pudo seguir actualizándolo. Aunque algunas emisoras aún lo utilizan, a pesar de ser una versión antigua y desactualizada, el programa cayó rápidamente en desuso.

Existe el caso contrario: software libre que no es gratuito. Por ejemplo, el editor de audio Ardour tiene su código fuente abierto, puede ser copiado y modificado, pero su desarrollador pide un aporte de al menos 1 dólar para descargar el programa. Este uno de los tantos modelos de negocio que se adoptan para garantizar la sostenibilidad de proyectos libres.

Al igual que libre no es lo mismo que gratuito, tampoco abierto es lo mismo que libre. El software que deja su código abierto se llama Open Source o, justamente, de código abierto. Aunque en términos prácticos resulte casi lo mismo, Open Source alude a una tradición diferente que hace hincapié en los beneficios prácticos de la apertura y no en sus aspectos políticos. Se trata de un detalle ideológico muy relevante:


204     GNU es el sistema operativo que se completa con el núcleo (kernel, en inglés) Linux.


Las expresiones «software libre» y «código abierto» se refieren casi al mismo conjunto de programas. No obstante, dicen cosas muy diferentes acerca de dichos programas, basándose en valores diferentes. El movimiento del software libre defiende la libertad de los usuarios de ordenadores, en un movimiento en pro de la libertad y la justicia. Por contra, la idea del código abierto valora principalmente las ventajas prácticas y no defiende principios.205

En resumen, un software podría tener su código accesible y permitir que sea modificado, pero si los motivos que impulsan esta apertura no son la libertad de las personas en el uso de esas tecnologías, el software no sería libre sino abierto. Muchas empresas comparten el código del software bajo un principio de eficiencia –cuántas más personas colaboren más minucioso será su desarrollo– y no bajo el principio de la libertad de compartir conocimiento. El Open Source es una metodología de desarrollo, una forma de trabajar. El software libre, en cambio, es un movimiento social.206

Para superar esta disputa, hay quienes prefieren el término FOSS –software libre y de código abierto, por sus siglas en inglés–; o, incluso, FLOSS, con la L de libre para subrayar la idea de libertad y que no dé lugar a equívocos por el doble significado de “ free” en inglés (libre y gratis).

 

Las 4 libertades del software libre

Además de poder acceder, estudiar y modificar su código fuente, hay otros factores que otorgan la condición de libre a un software, como la posibilidad de que se use y distribuya sin restricciones.


205 Para leer más sobre esta diferencia ver Stallman, R. (2004). Por qué el «código abierto» pierde de vista lo esencial del software libre. https://www.gnu.org/philosophy/open- source-misses-the-point.html.es

206 Stallman, R. (2004). Software libre para una sociedad libre. Traficantes de Sueños, p.57.


En definitiva, un software es libre cuando respeta las siguientes libertades:207

  • Libertad 0: ejecutar el programa como se desee, con cualquier propósito. Con el software privativo cada licencia autoriza su uso en una sola computadora. Ni siquiera en dos computadoras de una misma persona. En ese caso se necesitarían dos licencias.208En cambio, esta libertad del software libre habilita el uso de un programa sin límite de personas, computadoras, lugares o Quien quiera, donde quiera, para lo que quiera.
  • Libertad 1: estudiar cómo funciona el programa y adaptarlo a las necesidades Para esto es necesario publicar el código fuente, es decir, todos los archivos que permiten que el software funcione. Así será posible auditar el programa y estudiar si realmente hace lo que dice que hace –como no enviar los datos de uso  a terceros–. También permite encontrar fallas y vulnerabilidades, lo que contribuye a repararlas. Incluso, esta libertad permite adaptarlo, por ejemplo, haciendo una traducción a otro idioma. Esta es una de las libertades más significativas ya que, gracias a ella, el desarrollo y las mejoras de un software no dependen exclusivamente de una empresa  o una persona en particular, sino de una comunidad. Este tipo de libertad se entiende como colectiva por lo que, si no sabemos programar, siempre es posible  colaborar con otro tipo de conocimientos o habilidades: documentando, reportando fallas, traduciendo, diseñando o aportando fondos para su desarrollo.
  • Libertad 2: redistribuir copias para ayudar al prójimo. Compartir software libre no es piratería porque no se roba a nadie. Compartir con la comunidad es bueno: no hay sociedad si no hay solidaridad y generosidad con nuestros Esta libertad del software libre permite y anima a compartir y distribuir copias.

 


207 Estas libertades fueron definidas por el impulsor de este movimiento, el programador estadounidense Richard Stallman, fundador de la Free Software Foundation. https://www.gnu.org/philosophy/free-sw.es.html

208 Con los servicios de plataformas esto va cambiando de a poco. El modelo de negocios está mutando de la venta de licencias a las suscripciones para usar el software en línea en vez de instalado en la computadora.


  • Libertad 3: publicar las mejoras al software y Esta última libertad cierra el círculo ya que, al poder acceder a un software, estudiarlo y perfeccionarlo, esas mejoras deben volver a la comunidad para beneficio colectivo. Cualquiera podría luego usar de nuevo ese código, estudiarlo, transformarlo, seguir modificándolo y compartir nuevamente esas mejoras con la comunidad.

 

Para saber si un software es libre o no, sólo hay que atender a su licencia: la autorización que condiciona los usos de dicho software. Existe una gran variedad de licencias con distintos grados  de flexibilidad. Desde las más restrictivas, como las del software privativo que prohíben compartir el programa y su código, hasta las más libres como la Licencia Pública General (General Public License, GNU/GPL).209

Una buena metáfora para entender el software libre es compararlo con una receta de cocina. Si fuese una receta “privativa”, se podría comer el plato pero nunca se conocerían los ingredientes o el proceso completo para su elaboración. En cambio, con la receta libre, la fórmula completa –código fuente– estaría a disposición para que cualquiera la replicara. Además, sería sencillo incorporar ingredientes típicos de la zona para darle un nuevo sabor y luego compartir esas adaptaciones y mejoras por si alguien las quisiera probar.

Piratear, como estrategia de resistencia, reproduce la dependencia

Algunos medios comunitarios siguen apostando por piratear los programas como un modo de resistencia y protesta. Sin embargo, estas prácticas sólo ayudan a consolidar la supremacía del software privativo y evitan que se cuestione el modelo de desarrollo tecnológico. Lo más valioso del software libre no es el software en sí sino las prácticas que lo hacen posible, que resultan disruptivas para el sistema capitalista ya que no se sostienen sobre el afán de lucro, sino sobre la dimensión colectiva del co- nocimiento, la apertura y la cooperación.


209 Aunque esta es la recomendada por la Free Software Foundation (FSF) existen muchas otras compatibles con la GPL: https://www.gnu.org/licenses/license-list. html#SoftwareLicenses


La hipocresía de utilizar copias piratas y consentidas de software daña al software libre de paso que permite que la gente siga sin cuestionarse el sistema –cada vez más duro– de «propiedad intelectual» mientras ha convertido la ilegalidad en una parte normal y aceptada de sus vidas.210

Según The Software Alliance (BSA), la asociación que agrupa a las mayores empresas mundiales de desarrollo de software, en 2017 el 52% por ciento del software privativo instalado en las computadoras de América Latina y el Caribe no tenía licencia, llegando a cifras superiores al 80% en países como El Salvador, Nicaragua, Paraguay o Venezuela.211 A pesar de estas cifras, las compañías que venden software siguen siendo de las más ricas del planeta. No pareciera que el pirateo les haga mucha mella.

Al usar software privativo, aunque sea sin licencia, las personas se acostumbran a determinados programas y se consolida un ciclo de dependencia que comienza desde las escuelas y universidades. Las compañías de software privativo regalan los programas bajo la modalidad de licencia educativa para que quienes estudian aprendan únicamente con sus herramientas y, cuando salgan al mercado laboral, sean las que compren y usen.

La adopción de software libre por parte de un medio comunitario debería pasar por una apuesta por la libertad, por los procesos colaborativos, por ganar control sobre las tecnologías que usan. No se ha escuchado nunca a una emisora comunitaria promover el uso de semillas transgénicas “pirateadas” ni aunque estas fueran regaladas. Por el contrario, fomentan los cultivos tradicionales para salvaguardar así la soberanía  alimentaria.  Los mismos criterios funcionan en el ámbito de las tecnologías de la información y la comunicación para garantizar la soberanía o autonomía en este campo.


210 de Ugarte, D. (2009). Lo estatal, lo público, lo privado y lo privativo. Correo de indias. http://www.lasindias.com/lo-estatal-lo-publico-lo-privado-y-lo-privativo

211 BSA. (2018). Software Management: Security Imperative, Business Opportunity, p. 10. ht- tps://gss.bsa.org/wp-content/uploads/2018/05/2018_BSA_GSS_Report_en.pdf


Mitos en torno al software libre

¡Nadie lo usa! ¡Es muy complicado! ¡No hay programas libres para lo que yo necesito! ¡No es compatible con otros sistemas operativos! Estos son tan sólo algunos de los mitos que se escuchan, una y otra vez, en torno al software libre. Pero la mayoría son sólo eso, mitos. Es cierto que hasta finales de la década de los 90 para usar determinados programas había que ser un poco geek, manitas con la tecnología. Actualmente, hay aplicaciones para casi todo y algunas no tienen nada que envidiar a sus competidores privativos. También para las radios comunitarias. Existen  sistemas  operativos  como  EterTICs  GNU/Linux;  editores de audio libres como Ardour o Audacity; automatizadores como Rivendell o G-Radio; reproductores como VLC; o emisores de streaming como Butt. En definitiva, todo el software que se necesita para el funcionamiento de una emisora.212

Y aunque el uso de sistemas operativos libres en computadoras de escritorio es aún bastante reducido, no sucede lo mismo con otros dispositivos. Sobre todo si necesitan un alto desempeño  de recursos informáticos. En esos casos, los sistemas operativos GNU/Linux y sus aplicaciones se imponen de forma masiva:213

  • Servidores web. Estas computadoras donde se alojan las pági- nas web son máquinas con alta exigencia de recursos ya que muchas de ellas tienen que responder a miles de visitas por minuto. Estos servidores necesitan tener, al igual que las de escritorio, un sistema operativo instalado. La mayoría de ellos usan sistemas operativos basados en GNU/Linux y programas libres como Apache. Por ejemplo, Facebook, Amazon o Google utilizan software libre en sus servidores, aunque luego el software de sus plataformas sea privativo.

 


212       Se   puede   consultar   una   lista   más   exhaustiva   en:   https://radioslibres.net/ antes-en-windows-usaba-ahora-con-gnulinux-uso/

213 Los datos han sido revisados en agosto de 2019 y obtenidos de las siguientes páginas: http://news.netcraft.com/ http://www.top500.org/ https://gs.statcounter.com/https://moodle.net/http://trends.builtwith.com/cms


  • Supercomputadoras. Las 500 principales supercomputadoras del mundo obtienen mejor rendimiento gracias al uso de sistemas operativos basados sobre GNU/Linux. Las usa el gobierno de Estados Unidos, la NASA, o el
  • Teléfonos celulares Tres de cada cuatro smartphones del mundo tienen como sistema operativo Android, un software basado en Linux y desarrollado bajo licencias libres Apache y GNU/GPL. Que sea abierto permite que diferentes marcas de fabricantes de telefonía lo puedan adaptar a sus teléfonos, desarrollando aplicaciones propias y rebajando los costos de los equipos.214 Le sigue, con el 22% del mercado, el sistema operativo privativo iOS de los teléfonos iPhone.
  • Plataformas de educación virtual (LMS, por sus siglas en inglés). La mayoría de instituciones educativas usan Moodle para sus cursos en línea, un software libre que se puede modificar, adaptar y usar Según las estadísticas de Moodle hay más de 100.000 plataformas educativas registradas corriendo sobre este software a través de las cuales se ofrecen más de 19 millones de cursos. También, numerosas universidades del mundo usan Dspace, un software abierto para repositorios y bibliotecas virtuales.
  • Sistemas de gestión de contenidos web (CMS, por sus siglas en in- glés). Son programas para gestionar páginas web dinámicas de manera sencilla. WordPress se utiliza en la mitad de Otras usan Drupal o Joomla.

 

A pesar de que el  software libre  ha  demostrado  con  creces un desempeño sobresaliente, con estándares de seguridad y privacidad más altos, la mayor parte de computadoras personales no usan distribuciones de GNU/Linux. Las compañías de software privativo invierten millones de dólares para fortalecer su posición dominante. Casi todos los fabricantes de hardware tienen convenios con Microsoft; por eso, al comprar una computadora, ya viene preinstalado Windows.215 El software libre, impulsado por comunidades, organizaciones y algunas empresas, difícilmente puede competir con estas grandes corporaciones transnacionales.


214    El desarrollo de Android no es tan sencillo como parece. La posición de Google     es absolutamente dominante en el establecimiento de las “reglas” de desarrollo, cerrándolo cada vez más y agregando capas privativas en su desarrollo. Para saber más ver: https://www.gnu.org/philosophy/android-and-users-freedom.es.html


Estas firmas están presentes en reuniones internacionales de alto nivel para vender sus “soluciones informáticas” a gobiernos de todo el mundo.216 Se presentan como adalides de un futuro tecnológico al que sólo se puede acceder bajo sus condiciones.217 Y los Estados o centros educativos que no están dispuestos a plegarse a estos preceptos son intimidados.218 Estas compañías han diversificado su lobby “hasta convertirse en enormes monstruos que dominan el mercado y que tocan casi todos los aspectos de nuestra existencia moderna”.219 Una estrategia de neocolonialismo digital de alcance global.


215 En 2001 Estados Unidos demandó a Microsoft por abusar de su posición monopólica. Microsoft apeló la sentencia condenatoria logrando un acuerdo con la fiscalía en el que se comprometía a compartir parte de su código (APIs) con terceras partes. United States v. Microsoft Corp. Wikipedia: https://en.wikipedia.org/wiki/ United_States_v._Microsoft_Corp.

216 Criado, A. (2018). Google, Microsoft y Shell, las empresas que más invierten en  presionar  a  Europa.  El  Españolhttps://www.elespanol.com/economia/em- presas/20181104/google-microsoft-shell-empresas-invierten-presionar-euro- pa/350215397_0.html

217 Marvin, R. (2018). World Economic Forum: 13 Big Tech Stories From          Davos.          PCMag.          https://www.pcmag.com/feature/358765/ world-economic-forum-13-big-tech-stories-from-davos

218 Microsoft tiene un largo historial de presiones sobre instituciones que deciden migrar  a  software  libre.  En  Chile:  https://www.biobiochile.cl/noticias/2014/08/19/ diputado-mirosevic-revela-sabotaje-a-proyecto-que-fomentaba-software-libre-micro- softnosviolo.shtml y https://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2014/08/19/miro- sevicmicrosoftyellobbycontrael-softwarelibre/; en Brasil: https://www.infoworld. com/article/2666773/microsoft-unit-accuses-brazilian-official-of-defamation.html.

219 Fung, B. y Shaban, H. (2017). To understand how dominant tech companies are, see what they lobby for. Los Angeles Times. https://www.latimes.com/business/tech- nology/la-fi-tn-silicon-valley-lobbying-20170901-story.html


A pesar de estas dificultades, cada vez son más las radios comunitarias que comienzan a usar software libre. A este avance ha colaborado la Red de Radios Comunitarias y Software Libre220 que, desde 2013, agrupa a organizaciones y emisoras latinoamericanas –y algunas del Estado español– para fomentar el uso de tecnologías libres en la práctica radiofónica.

La Red funciona, a través de una lista de correo y un grupo    de Telegram,221 como una comunidad de apoyo, dando soporte, produciendo conocimiento e impulsando procesos de formación. Quizás, uno de los aspectos más interesantes de la Red sea el desarrollo de software libre orientado al trabajo de las radios comunitarias. Por un lado, EterTICs GNU/Linux, el sistema operativo creado y mantenido por Javier Obregón desde Misiones, Argentina;222 y, por el otro, el automatizador G-Radio programado desde Ecuador, por Charles Escobar.223

Sobre el hardware libre

Hablar de hardware es referirse a la “parte dura o física” de la infraestructura digital. Los discos duros, los cables, o las placas de audio y video, por ejemplo. Hardware y software interactúan y se comunican continuamente. El resultado de esa interacción es lo que permite usar las computadoras o cualquier otro dispositivo informático como las tablets o los smartphones.

Al igual que el software, el hardware también puede ser libre o privativo. Que un hardware sea libre posibilita conocer cómo está hecho, qué componentes tiene, cómo se comporta, y permite fabricar copias autónomamente o desarrollar software específico para controlarlo.


220      https://liberaturadio.org/

221 En el grupo de Telegram ya hay más de 400 emisoras y algunas aparecen en este mapa de radios liberadas que crece cada día: https://mapa.liberaturadio.org/

222      https://gnuetertics.org/

223      http://www.g-radio.org/


Uno de los problemas que encuentran las radios al utilizar software libre es que no reconoce algunas tarjetas de audio o de red. Si desde el mundo del software libre se tarda más en desarrollar controladores para hardware privativo es porque los fabricantes no liberan información sobre su arquitectura ni desarrollan drivers para sistemas GNU/Linux. Esta restricción obliga a quienes programan a hacer ingeniería inversa. Es decir, tratar de dilucidar cómo funciona un dispositivo a través de la observación y la experimentación.224

El desarrollo de hardware es más complejo que el de software. Requiere maquinaria e insumos que son caros. Se puede diseñar alguna que otra placa y soldar componentes pero no     es una tarea asumible a gran escala. Sin embargo, a pesar de que las experiencias y proyectos sean escasos, no significa que no existan. Se han producido radiotransmisores, controladores MIDI, teléfonos (Openmoko, Open BTS, o PiPhone), cámaras (AXIOM o Elphel), turbinas de viento, routers, impresoras 3D y hasta automóviles.225

Quizás, el proyecto de electrónica libre más conocido sean las placas Arduino.226 Con ellas se fabrican infinidad de proyectos  y existe una extensa gama de sensores y componentes para complementar las placas. Se han utilizado para fabricar desde osciloscopios y gestores de bibliotecas hasta impresoras 3D y sistemas de riego automático.227


224 Lo recomendable es adquirir marcas que publican controladores para distribuciones  GNU/Linux.  Se  aconseja  también,  no  comprar  los  últimos  modelos  disponibles, porque desde que se comercializan hasta que la ingeniería inversa logra publicar los drivers compatibles con los sistemas operativos libres suele pasar, al menos, un año. De todas formas, en la actualidad, la mayoría de componentes    más comunes como impresoras, tarjetas de red o Wi-Fi, audio y video funcionan perfectamente con distribuciones libres GNU/Linux.

225      Para ver una lista de proyectos de hardware libre: https://en.wikipedia.org/wiki/ List_of_open-source_hardware_projects

226      https://www.arduino.cc/

227 Desde hace unos años, también se ha popularizado el proyecto de Raspberry Pi, unas pequeñas computadoras con fines educativos, desarrolladas por una fundación sin fines de lucro con sede en el Reino Unido. A pesar de su aparente apertura y su practicidad para la elaboración de proyectos abiertos, su licencia no está especificada en ningún lado y ha sido objeto de debate en diversos foros.


Otro proyecto esperanzador es el lanzamiento de Lagarto, un procesador de código abierto ideado originalmente en México   y desarrollado en el Centro Nacional de Supercomputación de Barcelona. Su objetivo es disputar el dominio estadounidense en el terreno de los microprocesadores, liderado por empresas como Intel o AMD. Lo interesante de esta iniciativa es su apuesta por la apertura lo que, entre otras cosas, evita la instalación de “puertas traseras” que facilitan el espionaje, una práctica por la que han sido denunciadas sus competidoras en varias ocasiones.228

Radios comunitarias y hardware libre

La precariedad y falta de recursos han obligado a las radios comunitarias a investigar el funcionamiento de consolas y transmisores para arreglarlos y apañarlos con lo que tuvieran a mano. O incluso a construirlos.

La Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual argentina reconoció, finalmente, a los medios comunitarios. En 2010, un año después de su aprobación, la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual lanzó un censo para saber cuántos medios de este tipo existían. Pero sólo serían tomados en cuenta aquellos que estuvieran transmitiendo al momento del censo. No era el caso de muchas radios comunitarias que transmitían sólo por Internet o tenían sus equipos inservibles. La solución urgente que propuso la Red Nacional de Medios Alternativos fue convocar a dos talleres de construcción de transmisores FM de 10 watts de potencia, con sus respectivas antenas. Quienes participaron no tenían experiencia previa en electrónica y, sin embargo, se juntaron para armar, cortar, soldar y ensamblar los transmisores de sus propias radios. Un par de años más tarde, en 2012, el taller se repitió pero orientado a transmisores de televisión comunitaria.229


228 Corbella, J. (2019). Lagarto, un chip “made in Barcelona”. La Vanguardia. https://www.lavanguardia.com/ciencia/20191228/472547381837/barcelo- na-crea-chip-lagarto-bsc.html

229      Para  conocer  más  a  fondo  esta  experiencia  ver:  https://rnma.org.ar/documen- tos/talleres/918-a-partir-del-22-de-febrero-talleres-integrales-de-radio  y  https://


Gracias al abaratamiento de los costos de los componentes resulta cada vez más fácil fabricar transmisores. En 1980 el japonés Tetsuo Kogawa desarrolló miniFM –con instrucciones detalladas de los componentes y diseño de la placa– pensando en la posibilidad de instalar radios barriales.230 También existe  el modelo de transmisor que se construyó en el primer encuentro de la Red de Radios Comunitarias y Software Libre, en 2016 en Cochabamba, a partir del proyecto Broadcast your podcast de Lotte Meijer,231 derivado del modelo de Kogawa.

Estos transmisores de FM de baja potencia también se suelen utilizar para proyectos artísticos o de traducción simultánea en eventos. Sólo se necesita uno de estos aparatos emitiendo en una frecuencia al inicio o al final del dial, por ejemplo 87.5 Mhz, y se indica a quienes quieran seguir la charla en otro idioma que sintonicen la radio de su teléfono en ese canal. Hay otras soluciones para estos casos, también tecnologías libres, como la araña (spider) del Colectivo para la Autogestión de las Tecnologías de la Interpretación (COATI): “una cajita a la que se enchufa un micrófono, con salidas para auriculares con los que el público puede escuchar la interpretación”.232

La lista de proyectos de hardware libre es cada día más amplia. LibreRouter, por ejemplo, es un router libre diseñado para el armado de redes comunitarias. Una iniciativa de la organización AlterMundi orientada a reducir los costos de instalación de infraestructura comunitaria de comunicaciones. El LibreRouter consiguió, en septiembre de 2019, su homologación ante el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) de Argentina. Esta certifica que cumple con los estándares y reglamentos oficiales, y garantiza que sus prestaciones son las mismas que las de cualquier otro equipo privativo comercial.233


rnma.org.ar/documentos/talleres/1180-modelo-para-armar-medios-propios

230 Para ver instrucciones detalladas sobre cómo armar el micro transmisor de FM visitar http://anarchy.k2.tku.ac.jp/radio/micro/howtotx.html (en inglés).

231       http://lottemeijer.com/byp/index.php

232 Hache, A. (coord.) (2018). Op. Cit.

233      Conoce       más       sobre        el        proyecto        en        https://librerouter.org/ l ibrerouter-is-already-certified-in-argentina/


Obsolescencia programada, basura electrónica y su impacto ambiental

Una de las prácticas disruptivas que pueden impulsar las radios comunitarias en materia de hardware, es mitigar el impacto ambiental que provoca el consumo excesivo de dispositivos electrónicos. Este ciclo de consumo se sostiene sobre dos estrategias complementarias: la obsolescencia programada y la obsolescencia percibida.

La obsolescencia programada es el mecanismo a través del cual se establece de antemano la vida útil de un producto durante la etapa de diseño. Esto se puede hacer de varias maneras: utilizando materiales de baja calidad, a través del software, discontinuando la producción de repuestos, anulando la posibilidad de reparación, etc. El objetivo de esta práctica es acelerar y afianzar el ciclo infinito de comprar, usar y tirar. Un ejemplo emblemático es el de la bombilla eléctrica. El francés Adolphe Chailet creó en 1901 una lámpara incandescente que se encuentra prendida de manera ininterrumpida hasta el día de hoy. Por  eso se ganó  el apodo de “bombilla centenaria”. Sin embargo, el modelo de foco que Thomas Edison patentó en 1878 y que aún se usa, tenía una vida útil de 2500 horas que, intencionadamente, se fueron reduciendo hasta menos de la mitad.

La obsolescencia programada se refuerza a través de la obsolescencia percibida que consiste en lanzar al mercado nuevos productos con pequeños cambios de diseño. Así se genera la sensación de que un producto está obsoleto y debe ser renovado, a pesar de estar en perfecto estado. Falsa innovación para acelerar el consumo. Los casos más evidentes son las temporadas de la industria de la moda o los permanentes cambios de modelo en los teléfonos celulares o automóviles. La obsolescencia percibida se apoya en efectivas campañas publicitarias que asocian valores identitarios al consumo. Por ejemplo, las personas que se sienten parte de una élite cool por tener el último iPhone de Apple o calzarse unas zapatillas de una determinada marca.

 

El paso a una economía posindustrial, conocida como capitalismo digital, no significó la disminución del extractivismo, por el contrario, lo profundizó. La cantidad de minerales y metales necesarios para abastecer la elaboración de dispositivos electrónicos, cada vez más demandados, está sumiendo a los países proveedores de estas materias primas en guerras, pobreza, trabajo esclavo, desastres ambientales y violaciones a los derechos humanos de todo tipo. El coltan, el tungsteno, el oro o la casiterita, forman parte de los denominados “recursos de conflicto”. En la República Democrática del Congo:

Grupos armados, a veces en cooperación con intereses de actores externos o de países vecinos, extraen y explotan estos recursos. En última instancia, llegan al mercado internacional y se utilizan para financiar armas y actividades ilegales en lugar de contribuir al desarrollo de la RDC y a la mejora de sus condiciones de vida.234

Si bien la presión internacional ha empujado a las grandes tecnológicas a ser más transparentes en su cadena de suministros para asegurar que los recursos que utilizan tengan orígenes éticos, no todas ellas lo cumplen.235 Evidentemente, con condiciones laborales dignas en todas las etapas de producción, este modelo de renovación continua a precios mínimos no sería factible. Existen iniciativas como Fairphone, una empresa de los Países Bajos que busca producir teléfonos celulares sustentables reduciendo el impacto negativo sobre las personas y el ambiente. Sin embargo, es un teléfono de unos 500 $USD, inalcanzable para la mayoría de personas. Estas son las contradicciones del sistema.


234 Wohlfeil, J. (2012). Time por peace in wartorn Congo (DRC). ONG sueca Diakonia.         https://www.diakonia.se/en/How-we-work/Advocacy-and-policy/ Conflict-and-justice/Time-for-peace-in-war-torn-Congo/

235  Incluso, algunas familias de la República Democrática del Congo consideran a   estas empresas responsables de las muertes de sus hijos y han llevado ante los tribunales a Apple, Google, Microsoft y Tesla: https://www.eldiario.es/theguardian/ Minas-Republica-Democratica-Congo-tecnologicas_0_975002801.html


La industria del hardware provoca impactos ambientales profundos, no sólo en la etapa de extracción de recursos naturales para  su producción, sino también al final de su ciclo: el descarte. Según Naciones Unidas, en el año 2016, se desecharon 435.000 toneladas de teléfonos inteligentes y, en 2018, se produjeron 50 millones de toneladas de residuos electrónicos.236 Esta enorme cantidad de basura electrónica, y su gestión deficiente, pone en riesgo la salud y al medio ambiente. Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos no son biodegradables y tienen compuestos tóxicos como el plomo, el cadmio y el mercurio, que contaminan suelos, aguas y alimentos.

Aunque como consumidores existe muy poco margen para generar cambios estructurales, con algunas pequeñas acciones es posible alertar sobre este problema y reducir la generación de basura. También las radios comunitarias pueden aportar en este sentido. Una forma sencilla es alargando la vida útil de los dispositivos que ya tenemos: cuidándolos, manteniéndolos actualizados y libres de virus, usando software libre,237 reparándo- los,238 etc. A la hora de descartarlos es importante no acumular las computadoras viejas en una esquina de la radio o tirarlas al contenedor de la basura común. Muchas ciudades tienen puntos verdes que recolectan aparatos electrónicos para su correcto procesamiento. Lo ideal sería que los reciclaran, ya que se pueden obtener minerales y metales valiosos de las placas, pero no siempre ocurre. Por eso, lo más importante es reducir el consumo.


236 Quiñones, L. (2019). Los desechos electrónicos, una oportunidad de oro para el trabajo decente. Noticias ONU. https://news.un.org/es/story/2019/04/1455621

237 Una de las ventajas del software libre es que se desenvuelve mejor en equipos antiguos o con poca capacidad de procesamiento. Hay varias distribuciones “livianas” que nos permiten rescatar equipos obsoletos o desechados porque ya no “corren” con otros sistemas operativos. Las más conocidas son: Lubuntu, LXLE o Puppy Linux. Estas computadoras recicladas pueden servir para realizar grabaciones testigo o montar servidores con servicios livianos como streaming o Mumble (Voz sobre IP). https://radioslibres.net/computadoras-viejas-vuelvan-a-la-vida/

238 El derecho a reparar es impulsado por grupos de consumidores que exigen a las empresas que favorezcan la posibilidad de arreglar los aparatos electrónicos, ya sea con instrucciones o repuestos. Los clubes de reparación, espacios donde la gente se encuentra para reparar todo tipo de cosas, cada vez son más frecuentes. https:// radioslibres.net/si-no-se-puede-reparar-no-lo-quiero/

 

Te dejamos el trabajo de Investigación: Politizar la Tecnología   Radios comunitarias y derecho a la comunicación en los territorios digitales  Por: Inés Binder y Santiago García Gago   Aquí…

Politizar-la-tecnologia-Edicion-mexicana