EL MOVIMIENTO FEMINISTA ES EL MOVIMIENTO MÁS ESPERANZADOR EN ESTA ÉPOCA TAN OSCURA Conversamos con Daniela Elías

En el 1er Encuentro Plurinacional de colectivas Feministas y Organizaciones de Mujeres  se han movido y removido muchas cosas a partir de encontrarnos y re-encontrarnos entre quienes venimos articulando, tejiendo, criando desde la Lucha de las Mujeres, en esta oportunidad vamos a conversar con Daniela Elías quien nos va a compartir sus impresiones, expectativas, aprendizajes y desafíos que se manifestaron en ese espacio y del cual ha sido parte. Ella viene siendo parte de distintas colectivas feministas en Cochabamba desde donde también articula a nivel nacional.

Daniela nos dice: Me reivindico mucho en el espacio académico, me considero una feminista académica porque considero que esa es una trinchera también de lucha siempre y cuando esté articulada con la militancia de la calle. Entonces soy una feminista académica, actualmente estoy haciendo mi doctorado en estudios de género y soy parte o activo desde la articulación feminista Wañuchun Machocracia aquí en Cochabamba y también he tenido el privilegio de acuerpar un poco junto con muchísimas compañeras para la realización del Encuentro de Colectivas Feministas, hemos sido muchas de diferentes espacios.

Creo que estamos viviendo un tiempo muy oscuro y no solamente a nivel de Bolivia. Bolivia ha hecho parte a partir de ahora de los últimos acontecimientos electorales, de hecho los últimos años junto con la crisis económica también de un momento muy oscuro para la humanidad.

HYay un resurgimiento de unas ultraderechas con rasgos muy fascistas, aunque hay algunos que se nieguen a llamarlo así, yo considero que existen esos rasgos. Creo que lo hemos visto a partir del 2019, esos rasgos también en Bolivia. Es una pandemia regional, hay una crisis civilizatoria y si nos agarra desprevenidas creo que podemos sucumbir ante esta crisis y pues yo no quiero, así de simple, no es mi deseo.

Creo que la fuerza feminista y la de las organizaciones de mujeres en generas que se articulan en torno a las luchas antipatriarcales, anticolonialistas, antimperialistas, ahora también antifascistas, creo que son la respuesta para enfrentarnos a este monstruo que nos pretende devorar desde diferentes espacios y que atraviesa nuestras vidas y que las precariza y que decide además sobre nuestras vidas también. Entonces para mí esa ha sido una de las motivaciones personales y también imagino que de algunas de mis compañeras que articulan en Wañuchun Machocracia, la necesidad de vernos otra vez, de encontrarnos otra vez y de rearticularnos y de mostrar que estamos ahí.

Rescatar del encuentro que considero que ha sido un espacio sumamente plural, también muy orgánico, porque se ha construido, si bien nosotras tenemos un acervo de la ser feminista y de las organizaciones de mujeres en cuanto a formas de organización, ha sido un gran esfuerzo y también en ese sentido hay que reconocer y valorar muchísimo el esfuerzo que han hecho las compañeras del Alto al asumir la sede de este año, porque ellas han dado la cuerpa  mucho más que las otras compañeras de los otros territorios en esta ocasión, obviamente porque les tocaba ser anfitrionas.

El tejido de este encuentro ha sido un trabajo colectivo de muchas reuniones sostenidas a nivel nacional de manera visual, pero también reuniones departamentales que han sostenido las compañeras del Alto y de La Paz,  ahí se ha determinado, se han conformado comisiones y a partir de eso se han determinado algunos ejes de discusión que nos parecían fundamentales, aunque no agotan todas las problemáticas que nos atraviesan, pues sí creíamos que podían como al menos albergar a muchas de ellas. Entre ellas, por ejemplo, se ha discutido sobre la Autonomía de las Cuerpas, que además no sólo se ha limitado a hablar después de las cuerpas normalizadas, sino también de las cuerpas racializadas, las cuerpas disidentes, las cuerpas discapacitadas, y eso ha trascendido también a entender el territorio como parte del cuerpo.

Entonces, se ha entretejido con la Sostenibilidad de la Vida, que ha sido otra de las mesas para discutir todo lo que estamos atravesando en términos de extractivismo, de esta crisis civilizatoria que nos lleva a una implosión de un modelo extractivo, un modelo que se sostiene en el capital y no en la vida. Se ha discutido también sobre la Justicia Feminista, que entendemos sobre justicia feminista y cómo se pueden complementar esas prácticas de las mujeres organizadas y también de las comunidades, cómo se puede articular una justicia desde mujeres para mujeres, pero también para la comunidad, y para desprendernos de esa visión de la justicia patriarcal únicamente punitivista que solamente reproduce la violencia, reproduce las injusticias a las mujeres y la impunidad de los agresores. También se ha visto la necesidad de que en la justicia feminista no hablar solamente de la violencia, sino también hablar de una justicia feminista que atraviese todos los espacios, desde lo laboral hasta los espacios domésticos. Otra mesa importante ha sido el Racismo y Colonialidad, porque si bien muchas compañeras afirman, con mucha razón, por las experiencias de su vida, que para ellas el racismo no ha cesado, también otras vemos que no solo no ha cesado, sino que se ha agudizado estos últimos años y que el 2019 adquiere una suerte de impunidad otra vez…..ponemos aquí la conversa completa junto a Daniela para que sigas escuchando su intervención….