«Gracias al equipo, gracias por sostener esto, estar aquí, por sostener la radio. En 20 años te van a entrevistar a ti, aquí, para que cuentes esto que estás viviendo ahora…”
En un escenario donde los modos de vida acelerados han desplazado y disminuido los espacios de dialogo y escucha, nos propusimos hacer un Festival Radial de 3 días.
“Como abrir el pecho y sacar el alma” escribía Fito Páez en aquella famosa canción que resonaba hace 27 años, en la apertura de la Casa de las Culturas Wayna Tambo, porque si algo tocaba aclarar en estos 3 días, era que la Casa de las Culturas tiene 27 años y fue la radio quien cumplía 20 años. La radio es esa apuesta por difundir y fortalecer los procesos culturales y comunitarios, profundamente políticos, en los territorios y esa diversidad de voces y sentidos fueron criando su propio “estilacho”.
En 3 días intentamos sintonizarnos desde la palabra, tan propio y articulador de nuestros pueblos, con el desborde de energías, incluso antes y después del festival, desde la alegría del rencuentro y la fuerza de las complicidades que se fueron tejiendo desde los micrófonos, en el ejercicio complicado de hacer eso que no sabíamos y fuimos aprendiendo en el camino, con la terquedad que hizo posible 20 años de existir.
Fueron más de 27 horas de programas radiales en vivo, desde el escenario de Wayna Tambo, la cabina y tomando la calle 8 de Villa Dolores, más de 15 programas que nos acompañaron con más de 30 invitados/as, una feria de productores/as, más de 200 platos cocinados para la “Kermesse de la Escuelita del Vivir Bien”, una diversidad de música y literatura acompañando y resonando, además de muchos (muchos) abrazos. Y al final del domingo decíamos que era eso, el abrazo, las voces y las miradas que se sintonizaban para reconocerse en este camino de alegrías y luchas, y es ahí donde me vino esa despedida peculiar «Gracias al equipo, gracias por sostener esto, estar aquí, por sostener la radio. En 20 años te van a entrevistar a ti, aquí, para que cuentes esto que estás viviendo ahora…” Conversar viene del latín Conversari y significa “vivir, dar vueltas, en compañía” para sintonizar necesitamos conversar y sobre la palabra que da vueltas vivir, vivir sintiéndonos acompañados en esta apuesta y soñar con otros 20 años posibles.
Solo queda agradecer a quienes estuvieron presentes y a quienes acompañaron de manera virtual, por lo que se pudo dar y por lo que nos faltó, por todo eso que hay, por lo que queda en la memoria y por lo que se perdió y lo que quedo después de eso también…
