PRETEXTOS PARA CONVERSAR: CHATARRAS

Por: Juana Tambo Wayna Tambo/La Paz-El Alto

Hace unos 5 años más o menos que nos hemos venido a vivir a la ciudad, estaba súper contento, he aprendido harto, enseguidita me puse a estudiar y luego, luego a trabajar, he podido comprarme ropa, mi MP 1, 2, 3, y ahora el 4, para estar a la moda, tener lo último, engancharme a la onda del mundo pues, así bien interesante me sentía…. Pero algo que me sacaba de ondas, era porque mis papas no se habían modernizado, o sea querían seguir a la antigua, atrasados pues, se guardaban sus cosas, ni aunque estén feas las botaban…. En especial mi papá que como era albañil no renovaba sus herramientas, siempre las arreglaba para seguir usándolas, ni siquiera su overol quería votar, lo que hacía era remendarlo o parcharlo. Y cuando le preguntaba por qué hacía eso, decía que era parte de su vida y que le guardaba cariño… imagínense… y así en mi casa tenia montones de chatarras, según yo.

Un día vino mi abuelo de visita, y como llegaban las épocas de lluvia se pusieron a trabajar en los arreglos de la casa, me sorprendí al ver como transformaban las cosas, por ejemplo, las canaletas que ya estaban usadas las transformaron en tapas para las murallas, otras las soldaban para que sigan sirviendo, también vi como parchaban los cernidores de tierra para seguir trabando con ellas, ¡y así otras cosas más, en fin…!!! Y por si fuese poco, lograron hacer esos trabajos sin tener que gastar mucha plata…

Todo eso me ayudo a pensar, en como en realidad muchas veces no consideramos a los objetos como parte de nuestras vidas y que sin más ni más nos deshacemos de ellos y que con eso lo que hacemos es mandar mucho más al carro y a la montaña a nombre de basura, muchas veces guiados por la pinta, la moda o la televisión.

También me he dado cuenta que la plata va y viene, pero la vida y su compleja forma de existir, es algo que nos acompaña, nos reclama y nos desafía a pensar nuestra forma de vivir o estar, y que no sea tan fácil como copiarte de otros lados, porque así quizás no estas siendo tú mismo.