MEDICINA TRADICIONAL ANCESTRAL QUE GARANTIZA EL CUIDADO, CRIANZA Y REPRODUCCIÓN DE LA VIDA Por: Gabriela Condori Laura.

“Nos dimos cuenta que habíamos tenido la medicina en nuestras manos y casas, esas plantitas con las que nos vamos criando, con la crisis sanitaria que atraviesa el mundo entero a razón de la COVID-19, volvimos darles el valor que tienen, recordamos la memoria ancestral de uso, cosecha y cuidado de las mismas.”

El consumo de plantas medicinales en nuestros contextos es habitual, por tanto tendemos a naturalizar su existencia, es decir sabemos cómo consumirlas, pero por las crisis que el mundo está atravesando nos vemos impulsadxs a profundizar en su conocimiento, y ser conscientes de que las plantas medicinales varían de acuerdo a las características geográficas de los territorios que vamos habitando, así como en los nombres que las mismas tienen y con las cuales las conocemos.

También hemos sido y somos parte de la Comunidad que se implica, colabora y presiona a las autoridades para que entre todxs impulsemos estos otros conocimientos, concepciones de salud desde un enfoque más integral, que contemple e incluya el uso de plantas medicinales desde la ritualida/fiesta y conocimiento que contempla la experimentación, otras formas de consumir las plantas medicinales, ver con que otras se combinan en Baños, Sahumerios y Vahos.

Dado a que las ciudades son continuidad del Campo, muchas de las personas que allí viven, conocen y guardan en sus memoria el uso de nuestras plantas medicinales, por tanto aun las conservan e incluyen en sus consumos, por tanto cuando estábamos en lo más desesperante de la crisis sanitaria, recurrieron a su uso e incluso demandaros estas a las comunidades rurales donde crecen de manera silvestre.

Aunque tenemos muy presente del valor que la medicina tradicional tienen en nuestras vidas y formas de habitar nuestrxs territorios, aun tropezamos con:

  • El conocimiento y producción no tienen el valor que merecen, principalmente en las ciudades, no nos pagan el precio justo, desde los campos subvencionamos la alimentación de las ciudades, y también el cuidado de la salud.
  • Por estos procesos tan acelerados del sistema mundo, así como del gran sueño de progreso y desarrollo, nuestras comunidades también se está dejando de valor este conocimiento de a poco.
  • No contamos con las instancias ni equipamiento adecuado que nos permita investigar a nivel científico la composición, uso y dosificación de los preparados en base a plantas medicinales, nos queda el alivio que en gran parte cuando sobrepasas el consumo de mates no pasa nada, porque es natural y el cuerpo elimina fácilmente el excedente.
  • No existe un compromiso de parte de las autoridades competentes que reconozcan nuestro trabajo y aporte, que nos permitan acceder a un registro sanitario que facilite la comercialización de nuestros productos y nos garantice una remuneración económica justa. No existen espacios de socialización de la normativa vigente que nos permita iniciar los trámites para obtener Matricula y Registro Sanitario.
  • No encontramos espacios para poder vender nuestros productos.
  • El contexto actual de deforestación e incendios en nuestras tierras amenazan en gran medida la conservación de la herbolaria que compone a la medicina tradicional, con la consecuente sequía que impide la reproducción y conservación de las especies.
  • Un factor calve de crianza y cuidado de las plantas medicinales, tiene que ver con la temporalidad de las mismas, especialmente en las tierras altas, cosechamos cuando esta verde para almacenar en tiempos secos; esto se ha visto afectado por los altos consumos en las ciudades, especialmente en el tiempo de la crisis sanitaria. Muchas plantas ya nos las encontramos fácilmente, sino que ahora tenemos que buscarlas en lugares más alejado o empinados.
  • Aún tenemos falencias en cuanto a la difusión del trabajo que venimos realizando, así como la sistematización de nuestra experiencia de trabajo.
  • Aquí el sistema de salud vigente en el país, no le dan valor al gran aporte que hacemos desde nuestros conocimientos de medicina tradicional.
  • El contexto político que atraviesan nuestros territorios también son un factor que condiciona en gran medida la circulación de nuestros productos y saberes.
  • La juventud va perdiendo el interés en profundizar el conocimiento sobre el uso y consumo de plantas medicinales y la medicina tradicional.

 

Evidenciamos también las siguientes fortalezas con las cuales vamos transitando este camino de conocimiento y crianza de la vida:

  • Establecemos, en colaboración y coordinación con otras instancias, espacios de intercambio de saberes y experiencias entre comunidades de Tierras Altas y Tierras Bajas, que nos permiten conocer otras perspectivas.
  • Estamos animados a seguir investigando, conociendo, recuperando más plantas medicinales desde nuestros ancestros con los medios que tenemos.
  • Generamos espacios de réplicas de intercambio de experiencias y conocimientos que adquirimos de viajes que hacemos.
  • Impulsamos y organizamos ferias de Medicina Tradicional con las escuelas de nuestras comunidades, buscando que las mismas sean sostenidas en el tiempo y que despierte la curiosidad de las wawas.
  • Aprovechamos los espacios de las fiestas y asambleas para dar a conocer nuestro trabajo y el beneficio de las plantas de nuestras comunidades, hacemos circular el conocimiento que sobre ellas existe.
  • Impulsamos a la población más joven a que se incorpore y participe en el registro de las plantas medicinales de nuestras Comunidades y regiones.
  • Impulsamos a partir del ejemplo, la siembra y crianza de plantas medicinales.
  • Es fundamental la circulación de conocimiento que pase de generación en generación, que garantice la reproducción y crianza de la vida.
  • La música, el ritual y el trabajo artístico cultural son aliadxs que permiten la circulación y difusión de conocimiento en cuanto al uso, crianza de plantas medicinales.

Hasta aquí hemos compartido un poco de lo conversado en este encuentro de Medicina Tradicional Ancestral entre comunidades de Tierras Alta y Tierras Bajas…queda pendiente dar a conocer de a poco nuestro caminar…

Santa Cruz Octubre 2021.