Es día del peatón en Bolivia, casualmente este mismo día se realiza la inauguración de la feria de Santa Anita en Villazón, región sur del país, frontera con La Quiaca en la Argentina. Las Alasitas y las Santa Anitas son fiestas que celebran la abundancia de la vida, la crianza de lo pequeño que ya contiene en sí lo que es, pero sin ser del todo eso que se es. Fiesta ritual urbana que recoge la tradición de las ILLAS en las zonas rurales. En la inauguración de dicha festividad está presente el Ballet Inspiraciones Sureñas de Villazón.
Con este grupo de danza ya nos conocimos antes, empezamos una relación a través del Centro Cultural Arawi integrante de la Red de la Diversidad en esta ciudad fronteriza. Realizamos un taller y conversamos de la energía e importancia de las danzas y las músicas en nuestras culturas originarias, su relación con los ciclos regenerativos de la vida, su vínculo con lo comunitario y el estar en los territorios.
En este evento, Inspiraciones Sureñas nos compartió un cuadro chapaco, de ese sur vecino, con rueda de la pascua, cueca y rueda del carnaval, músicas y danzas que acompañan el ciclo agrícola del valle central de Tarija. Luego nos mostraron otras danzas del mundo y cerraron con algo de las continuidades culturales del otro lado de la frontera, del norte argentino hermano.
Ese día no vimos las danzas regionales de Villazón, de matriz cultural chicheña andina. Sin embargo, esta dimensión está muy presente en la actividad de Inspiraciones Sureñas. Las coplas, los carnavalitos, la cueca regional, el “torito y caballito” hacen parte de esa rica tradición propia. Casira Grande es la comunidad donde principalmente se conversa la presencia de la danza tradicional del “torito y caballito”, al compás de las sicureadas, el tambor y las anatas para que danzantes alegres agradezcan a la madre tierra por la arcilla que les proporciona para elaborar la abundante cerámica de la región. Berque, Chipihuayco, Chagua, Calahoyo y la misma casi Grande son esos lugarcitos de la ruralidad de Villazón que necesitamos reencontrar y conocer.
Este encuentro con Inaspiraciones Sureñas, el ya sostenido trabajo, cada vez más consolidado del Centro Cultural Arawi en esta región del país, augura un tiempo fructífero de vínculos y estrategias culturales. Sakludos desde la Red de la Diversidad a esta zona fronteriza de Bolivia. Como dice la gente del Ballet Inspiraciones Sureñas, “Somos frontera, somos cultura, somos Bolivia”.
